Pues por fin me decidí y este fin de semana le metí mano al madroño.
Esta primavera, después de ver unos cuantos vídeos de la escuela de bonsai,mientras daba un paseito por un centro de jardinería, no pude resistirme al verlos a un precio más que asequible, así que después de rebuscar entre todos los que había, al final me decanté por este.
Estaba con pulgón por lo que decidí no estresarlo más y directamente lo trasplanté a una maceta más grande, sin tocarle las raíces, hasta que estuviese sano, tal como veis en las fotos.
Aquí ya le corté un par de ramas que salían desde muy abajo, hace 3 semanas, pero entonces, como novata que soy, no sabía muy bien como colocar las ramas.
Este fin de semana, como lo vi muy sanote, brotando a tope, lo deshoje sin quitarle las yemas terminales y tras mirar y remirar, me vino la inspiración y este es el resultado.
Apenas tenía ramificación, solo corté un par de ramítas que salían desde un mismo punto.
No se si tenía que enrafiar todo el tronco, pero solo envolví esa rama ya que es la que mayor presión iba a soportar, hacía una V mucho más cerrada con la rama que decidí que sería el ápice, es una rama bastante gruesa y me daba miedo por si la quebraba, miedos de una novata.
El pobre ha sido el conejillo de indias en cuanto al alambrado, ¡¡¡es el primero!!! y ya he visto algunos fallos después de volver a ver el vídeo de la Escuela de Bonsai.
A ver como evoluciona, si es que sobrevive... y para la primavera que viene lo trasplanto a colador y lo coloco en su posición, con el tronco un poco inclinado hacia la izquierda, al contrario de como está plantado en la maceta, para que de la sensación de que la primera rama está más inclinada hacia el suelo.
Un saludo.
